sábado, 20 de febrero de 2010

Ahí queó

Cuando más crees en la sensatez de una persona, y más apuestas por ello, antes te decepcionan.
Pueden tener toda la razón del mundo, o no, pero si la pataleta es por una forma de hacer las cosas, de las que te estás quejando, no actues de igual forma.
Ya lo dije en el pregón, que todo pasa, pero todo queda, y que aquí, gracias a Dios, Él es el único eterno.
No creo que se haya puesto en entredicho vuestra actitud como Hermanos de la Hermandad, sino como auxiliares y cuerpo de capataces, porque muchas veces, y como yo mismo os he dicho, se os han escapado algunos detalles, y teneis que reconocerlo.
Solo quiero que sepáis que se os ha querido y se os aprecia mucho, y por eso os dedico esta entrada.
Como se que la confianza siempre ha primado, y sobre todo la sinceridad, también os pido que no hagáis más leña del árbol caído.
Un fuerte abrazo y hasta siempre.

1 comentario:

  1. Querido Antonino y hermano en Cristo, sabes con sinceridad que te aprecio y por ello valoro tu perspectiva y forma de ver las cosas, pero aquí no se trata de pataleta, sino de revindicar un trato justo, que no se ha producido. Creo que lo hemos comentado en alguna ocasión, hay en esta vida dos cosas que no soporto, la mentira y el engaño (La falta de sinceridad): Soy confiado por naturaleza, y por ello confió en las personas, y cuando descubro que me mienten y luego me engañan no lo puedo soportar ¿No crees que la labor que he desarrollado, aun siendo necesaria, carece de la trascendencia como para que de ella dependa la buena marcha de la cuadrilla de costaleros? ¿No crees que si mi labor no respondía a las expectativas se me debía de haber notificado? ¿No piensas que hay que tener la valentía para decir las cosas a la cara en vez de estar agazapado detrás de un cargo y desconsiderar lo más importante: la persona? ¿No crees que las personas, por muy torpes que seamos, siempre aportamos algo? ¿No crees que aquellos que se creen la quintaesencia de la costalería, aun tienen que aprender bastante? En fin querido Pitu, cuando se habla de personas las formas son muy importantes, yo no me he aferrado nunca a ningún cargo, y menos aun en este caso que era voluntario, mi humanidad y educación no puede, ni debe, pisotearse impunemente por la prepotencia y la soberbia de quien se cree Dios, y Dios sólo hay uno y es al que yo le rindo cuentas, a los amigos como tu les doy explicaciones y cariño. Un fuerte abrazo

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